Nosotros

Nuestra historia

Bioética y Ambiente es un proyecto de divulgación, promoción y formación bioética de las personas para el cuidado y respeto a nuestro entorno natural emitiendo de manera imparcial recomendaciones en pro del medio ambiente.

Lo que nos rige

MISIÓN
Promover el cuidado y respeto al medio ambiente creando conciencia de las causas de la crisis ambiental de nuestro tiempo.

VISIÓN
Ser una plataforma bioética de excelencia que contribuya al cuidado y respeto a nuestro entorno natural a través de la formación bioética de las personas.

VALORES
- Respeto al medio ambiente
- Conciencia ambiental
- Responsalidad socioambiental
- Biofilia

OBJETIVOS
- Crear conciencia sobre el cuidado y respeto a nuestro entorno natural.
- Diseminar el conocimiento bioético a todas las personas.
- Mejorar la vida humana y no humana a través de la Bioética Ambiental.

Nuestro imagotipo

El neologismo “bioética” fue acuñado por Fritz Jahr en 1927, quien establece la importancia de la relación ética de los seres humanos con los animales y las plantas. En 1970 V.R. Potter retoma el término para sostener que ésta debe proveer los principios para la conducta correcta del ser humano respecto a la vida, tanto de la vida humana como no humana (animal y vegetal), así como el ambiente en el que pueden darse condiciones aceptables para la vida.

Así, el imagotipo de “Bioética y Ambiente” representa, a través de sus elementos, el diente de león (Taraxacum officinale) y la mariposa (Morpho menelaus), la necesidad de expandir este tipo de conocimiento para generar prácticas y actitudes responsables frente a nuestro entorno natural.

El diente de león es una planta con propiedades medicinales y de interés apícola, además de que crece prácticamente por todo el mundo. En nuestro imagotipo, el diente de león representa la analogía que existe entre la distribución de sus semillas y el esparcir el conocimiento al ser el nexo entre los investigadores y el público en general.

La mariposa, por su parte, es un insecto que representa el cambio, pasando por el huevo, la larva, la pupa, hasta ser adulto. En nuestro imagotipo, este proceso de cambio representa la constancia, la vida y la reinvención constante para llevar el conocimiento bioético a la sociedad en general.